La sensatez volvió a Mendoza. Tras los serios disturbios que provocó en todo el territorio provincial el tratamiento y posterior aprobación de la Ley 9.209, modificatoria de la Ley 7.722, que prohíbe la utilización de sustancias químicas como el cianuro, ácido sulfúrico y mercurio en la actividad minera, el Gobernador Rodolfo Suarez resolvió suspender la reglamentación de la norma y llamó a una mesa de diálogo para garantizar la paz social.

En una conferencia de prensa, el mandatario instó a todos los mendocinos a un debate genuino con la intención de cuidar el agua y generar fuentes de empleo. 

Aseguró que un político no solo tiene que tomar decisiones legales sino también legítimas, y que si esta ley no tiene la legitimidad del pueblo, no hará nada en contra del pueblo.

La decisión no significa que el gobierno dará marcha atrás en su intención de impulsar la minería en la provincia, pero si abre un compás de espera para  encontrar un consenso entre las partes, lo cual a primera vista es muy complicado.

La política frenó su posición, ahora es el tiempo de los representantes sociales quienes deberán defender la suya sabiendo que cuentan con la atención de los medios de comunicación a nivel nacional. Una oportunidad que no deberán dejar de aprovechar y que también puede ayudar  a conflictos similares en otras provincias.

Fotografía: Prensa Gobierno de Mendoza