“Mujeres que han dejado huellas”
Graciela M. Catalán presentó su primer libro “Mujeres que han dejado huellas”, de Editorial Dunkén.
Un libro que nos muestra a mujeres que marcaron un camino, dejando surcos y profundas huellas.
Mujeres del siglo XIX y del siglo XX que lucharon por trascender y salir del ostracismo más allá de vivir en una sociedad cerrada, machista y discriminadora, y donde el rol de la mujer era responder a un mandato particular donde no tenían cabida las profesiones y debían requerir y sortear siempre el mismo permiso social.
Mujeres como Alice Guy, una cineasta, directora y guionista que filmaba sus películas con el nombre de su marido porque en ese momento no era permitido que una mujer entre comillas desarrollará ese tipo de actividad y que fue borrada de la historia de los anales del cine mundial pasando muchos años hasta que se la reconoció.
Chavela Vargas, musa inspiradora de Almodóvar. La gran cantante que había nacido en Costa Rica, pero que fue adoptada por Méjico. Luchó con su arte por imponerse frente a una sociedad machista y que discriminaba.
Salvadora Medina Onrubia, periodista y guionista, trabajo en el Diario Crítica. Fue madre a los 16 años. Sus ideales políticos y de lucha, para obtener la igualdad de las mujeres, la llevó a enfrentarse a una sociedad que también discriminaba notablemente.
Julieta Lanteri, la quinta médica y cirujana que tuvo que pedir permisos para estudiar medicina y fue creadora del partido socialista, con Alicia Moreau de Justo, y la primera mujer en votar.
Alfonsina Storni, gran poeta, guionista, actriz, que junto con Salvadora Medina Onrubia, compartieron la soledad de criar a sus hijos frente a toda una sociedad machista y de élite.
Paloma Efrén (Blackie) cantante de jazz, periodista, innovadora, la primera productora mujer, luchadora incansable
Y finalmente Petrona Fernández Funés, (abuela materna de la autora y como ella la define “su musa inspiradora”) una gran luchadora, mujer que trabajo en una fábrica textil, industrial, gremialista en su época. Ella resaltó y luchó por los derechos de igualdad de las mujeres en una sociedad provincial (Villa Mercedes San Luis) muy cerrada y con cero posibilidades para las mujeres. Su madre (bisabuela de la autora) fue echada y desheredada por haber quedado embarazada a los 14 años.
Estas historias sintetizan el espíritu de lucha de una enorme cantidad de mujeres que desde sus lugares defendieron la igualdad de derechos enfrentando una sociedad machista y discriminadora.
Como anécdota, Graciela Catalán cuenta que el título del libro surgió de una frase que le dijo la jueza subrogante del Juzgado Civil N°8, la Dra. Myriam Cataldi, el día de su retiro (por jubilación) de los tribunales, “Vos sos de esas mujeres que han dejado huellas”.
Hacia la magistrada, la autora solo guarda palabras de elogio y la define “como una profesional y mujer comprometida con su cargo, con la labor judicial y fundamentalmente por ser humana y luchadora a la par de todos los integrantes del juzgado”.
“Mujeres que han dejado huellas”, será presentado en la Feria Internacional del Libro a partir del 26 de abril próximo. El 16 de mayo también será presentado en la Casa de San Luis CABA y posteriores presentaciones se realizarán en la ciudad de Villa Mercedes (San Luis).
Acerca de la autora:
Ingresó al Poder Judicial de la Nación como meritoria, como la mayoría de los empleados judiciales, y fue nombrada definitiva el 21 de marzo de 1976.
Al principio su situación era muy complicada y debía recibir la ayuda de sus compañeros y funcionarios, ya que no cobraba sueldo alguno y era el sostén de la casa junto a su madre.
A la vez que trabajaba, cursaba la carrera de abogacía en la Facultad de Derecho de Ciencias Sociales de la (UBA).
En sus comienzos se desempeñó en la mesa de entradas como auxiliar en el Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Comercial N° 20.
En el año 1980 fue ascendida a auxiliar escribiente en el Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Civil N° 16, donde cumplió tareas de despacho en general y tomando audiencias testimoniales y confesionales.
En 1984 pasó a la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Comercial en el sector de despacho de Mesa de Entradas. Y en la década del 90 comenzó a trabajar en la oficina de Jurisprudencia.
Pero su vocación de servicio y la pasión por el fuero de familia la llevó en el año 2006 a pasar como oficial mayor al Juzgado Civil N°83 a cargo de la Dra. Patricia Zabotinsky. Probablemente ese deseo se hizo aún más fuerte por la lucha personal que ella misma debió afrontar por la adopción de su hijo.
Finalmente pasó en el año 2007 al juzgado Civil N°8 con la Dra. Julia Servetti de Mejías y con la Dra. Myriam Cataldi, juez subrogante, hasta su retiro definitivo de la justicia tras cumplir 39 años, con el cargo de jefa de Despacho interina.
Graciela Catalán se recibió de abogada y continuó estudiando periodismo en la Fundación del Libertador escribiendo ad honorem columnas y participaciones especiales ya sea sobre actualidad jurídica y de distinta índole. Estudió el Lenguaje de Señas (LSA) en el Instituto Villasoles. Realizó cursos de especialización y seminarios relacionados con el tema de violencia familiar y todas las actualizaciones de Derecho de Familia ante las modificaciones del Código Civil, Ley de Salud Mental y demás cambios procesales y jurídicos.