Así lo sostuvo un juez Civil y Comercial al condenar a un empresario por tardar 38 años en reconocer a su hija
Es por el daño moral que le provocó al vulnerar su derecho a la identidad y por el desinterés demostrado durante el proceso.
La pequeña le explicó a la jueza con sus propias palabras que ese apellido no la identifica, la afecta emocionalmente y la avergüenza. El progenitor se encuentra detenido, cumpliendo una condena por un delito grave que, en su momento, fue muy divulgado en la comunidad.
Para el MPF no hacerlo lesionaría el derecho a la identidad del niño y llevaría a registrar vínculos filiales que no se corresponden con la realidad.
La medida surge desde el Ministerio de la Primera Infancia y el Registro Civil de la provincia.
Sociedad 01 de febrero de 2018 PATO COSTA