De acuerdo a un informe sobre fallecimientos en contextos de encierro elaborado por el Área de Análisis e Investigaciones Interdisciplinarias de la Procuraduría de Violencia Institucional (PROCUVIN), en el primer semestre de este año se registraron 8 muertes en establecimientos pertenecientes al Servicio Penitenciario Federal.

Cinco de los decesos se produjeron por padecimientos físicos y/o enfermedades diagnosticadas. Los otros tres se debieron a consecuencia de actos lesivos.

En estos últimos, al ser muertes traumáticas, se iniciaron investigaciones judiciales de oficio.

El documento indica que en la Unidad N°7 de Resistencia y en el Complejo Penitenciario Federal (CPF) II de Marcos Paz hubo dos fallecimientos en cada uno de los establecimientos. Mientras en el CPF I de Ezeiza, el CPF VI de Mendoza, la Unidad N° 6 de Rawson y la Unidad N° 35 de Santiago del Estero tuvieron uno cada uno.

Las edades de las personas detenidas fallecidas van de los 27 a los 73 años. La mayoría argentinos y solo uno español.

El informe de la procuraduría a cargo del fiscal Alberto Adrián María Gentili, muestra una baja en la cantidad de muertes respecto al mismo período del año pasado (17 casos).

El trabajo tiene como objetivo dimensionar la violencia institucional existente en los establecimientos penitenciarios y promover mecanismos para su abordaje.

Todos los datos son ingresados a la  “Base de Fallecimientos en Contextos de Encierro”, a cargo de las especialistas María Luz Damone, Victoria Rangugni, Mariana Vigil y Luciana Virgolini.

Fuentes: Fiscales.gob.ar