Los femicidios parecen no tener freno alguno en nuestro país, y con el correr del tiempo no solo se mantienen los casos, sino que cada vez aumenta la frecuencia. Aunque duela decirlo, se ha vuelto cotidiano que un niño pierda a su madre por la violencia de genero que afecta día a día nuestra sociedad.

Las cifras, surgen del Observatorio de Femicidios de la organización civil La Casa del Encuentro, que arrojo, que 3.158 niños y adolescentes perdieron a su madre a través de femicidios en un periodo de casi 10 años, de 2008 hasta el primer semestre de este año.

Pero aún más alarmante, es que, en lo que va de 2017, cada 18 horas un niño pierde a su madre por femicidios. La cifra de este año arroja que 239 hijas e hijos, perdieron a su madre. De esta cifra, 153 son menores de 18 años. Y en estos casi 10 años, los menores de edad que quedaron sin sus madres fueron 2.012, un porcentaje del 63%.

Hasta ahora, el año en el que más femicidios se registraron, fue en el año 2013, con 295 casos. En ese año 405 hijos sufrieron la pérdida de su madre. Cifra muy parecida fue la del año pasado, en la que se registraron 290 femicidios, una mujer cada 30 horas, en el cual los hijos afectados fueron 401. Lo más preocupante es que de continuar la tendencia de los casos como en este primer trimestre, la cifra superaría la del año 2013, y podríamos estar frente al año en el que más femicidios se cometan.

Este año, el congreso convirtió en ley una modificación al Código Civil y Comercial de la Nación que establece que quedan privados de la responsabilidad parental quienes son condenados por delitos de violencia de género o que atenten contra la integridad sexual. Hasta ahora, un hombre acusado de femicidio perdía la patria potestad recién cuando la condena estuviera firme y, a veces, ni siquiera en esa instancia.

El mes pasado, la Cámara de Diputados convirtió en ley la creación de centros de protección a las víctimas de delitos, los cuales se encontraran abiertos las 24 horas. La Ley Brisa, aprobada por el Senado aun debe ser votada en Diputados. Esta ley, consiste en que en caso de producirse un femicidio, si la mujer tuviese hijos menores de 18 años, estos, deberán recibir una reparación económica equivalente a un haber jubilatorio mínimo hasta cumplir los 18 años y que tengan garantizada una cobertura de salud integral, haciendo especial énfasis en los tratamientos psicológicos.