Una interesante iniciativa en la provincia de Buenos Aires, impulsada por el poder ejecutivo provincial, buscará reducir la alícuota de ingresos brutos que se aplica hoy en los créditos hipotecarios.

El gravamen que hoy se está pagando  es del 8% el cual  según la propuesta sería reducido a solo el  1,5%.

La intención es mejorar las condiciones para la compra de viviendas para uso familiar  por parte de un sector social que hoy se ve impedido  siquiera a pensar  en poder ser propietario a raíz de los altos valores en la propiedades.

Es evidente que la combinación de una sobrevaluación del m2 construido y los bajos salarios, no permiten el despegue de los créditos hipotecarios.

El Senado bonaerense dio media sanción al proyecto aunque con algunas modificaciones respecto del proyecto original enviado por el ejecutivo, remarcando que el beneficio debe ser aplicado al tomador del préstamo y no al banco.

Habrá que esperar la sanción definitiva de la ley y la forma en que será instrumentada, cosa que seguramente se llevará a cabo en los próximos meses.